Una de las pasajeras comentó que comenzó a saltar y ayudar en lo que fuera, esto porque el equipo de tripulación estaba herido y no podía prestar ayuda.
Esta mañana se viralizó una emergencia que protagonizó un vuelo desde Sidney-Santiago, de la empresa Latam, si bien el accidente no pasó a mayores ya que no se reportaron víctimas fatales, los minutos de terror vividos por los pasajeros se quedarán plasmados en su mente.
Así lo manifestó Priscilla Waller-Subritzky, pasajera del vuelo quien conversó con el medio neozelandés Herald, donde realtó su aterradora experiencia.
"Varios pasajeros y tripulantes fueron arrojados al techo del avion", comentó Priscilla quien se encontraba viendo una película cuando el avión perdió altitud.
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Continuando con su relato, Waller-Subritzky comentó que comenzó a saltar y ayudar en lo que fuera, esto porque el equipo de tripulación estaba herido y no podía prestar ayuda.
A eto agregó que una vez terminada la adrenalina, sintió mucho dolor, siendo derivada a emergencias, "he estado en muchos vuelos antes, pero este estaba completamente fuera de lugar", dijo la pasajera.
Daniel, otro de los pasajeros, también entregó su testimonio enfatizando que jamás había vivido algo así en 15 años de vuelo "el avión cayó drásticamente en picada durante un par de segundos y unas 30 personas chocaron con fuerza contra el techo", relató.
En esta línea recordó que los pasajeros gritaban y que le fue difícil distinguir si lo que salpicaba en el avión era sangre o vino tinto, estremeciendo el relato.
"Ninguno de nosotros supo lo que había pasado hasta después del vuelo, solo intentaba mantener a todos tranquilos. Nunca escuchamos ningún anuncio del capitán", comentó Daniel.
Un tercer relato fue el de Brian Jokat, quien dijo que el avión "simplemente cayó" y que "no hubo turbulencias previas, simplemente navegamos sin problemas durante todo el camino".
Además recordó que "uno de los pasajeros que estaba a dos asientos de mi, no llevaba el cinturón de seguridad y producto de la emergencia, salió volando y se estrelló contra el techo".
Ya al terminar su relato, Jokat señaló que "pensé que estaba soñando. Abrí los ojos y él estaba en el techo del avión boca arriba, mirándome. Era como El Exorcista".
A estos relatos se suma que hubo tres a cuatro pasajeros que se estrellaron contra el techo, rompiendo el interior del avión con sus cabezas y hombros.
A raíz de esto Jokat señaló que hubo pasajeros que temrinaron con "huesos rotos, mientras que otros tenían heridas en el cuello y la cabeza".
