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La cantante utilizó sus redes sociales para hacer una profunda reflexión sobre su desempeño en la carrera.
Un crudo relato entregó Adriana Barrientos sobre un acoso sexual que vivió en Mega, donde el director de un programa se le fue encima en los estacionamientos del canal.
«Durante mucho tiempo estuve con esa tranca. Fue tan chocante lo que me pasó...», relató la panelista en Zona de Estrellas.
Para contextualizar, la modelo recordó que este ataque degenerado lo vivió cerca del año 2000.
"Me pasó una cosa espantosa. Me acuerdo que estaba haciendo un casting para leer el tiempo, que en ese entonces estaba Eduardo Fuentes (el animador estaba a cargo de El Tiempo, en Mega, a inicios de la década del 2000)", consignó el sitio Glamorama.
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"Se me ha tirado encima"
Continuando con su relato, Adriana Barrientos detalló que «el director, que era un director del tiempo de Mega, no recuerdo el nombre, pero guatón, chico, gordo. Por si me estás viendo, un día me voy a acordar de tu nombre y te voy a salir a funar en las redes sociales, como debí haberlo hecho.
Enseguida prosiguió con el relato de ese acoso que la marcó. «Y ese gallo me dice ‘quiero hablar un ratito contigo, ven a mi auto’. Yo tenía 23 años, recién había salido de la Escuela Militar. Era mi primera experiencia en televisión. Me mete al auto y yo veo que Eduardo Fuentes se va, porque él hacía el tema del tiempo y se retiraba. Me llama al auto, yo voy, ‘siéntate, conversemos’... ¿Me creerás tú que el gallo se me ha tirado encima?. ‘¿Quieres quedarte tú con el puesto para leer el tiempo?’. Y el gallo se me abalanza encima, asqueroso, a besarme, en los estacionamientos de Mega".
Tranca
"Yo le digo ‘¡¿pero cómo se te ocurre!?’. Gracias a Dios siempre he sabido defenderme muy bien y con un genio de la cresta. Le pego un tremendo empujón al gallo. Nunca me imaginé esto. Era casi como el productor que te iba a llevar para la casa, no sé. Y salgo corriendo, llego a Vicuña Mackenna, me tomo un taxi y me voy a mi casa", continuó Adriana Barrientos.
"Lloraba. Obviamente no quedé para leer el tiempo en Mega. Lloraba. Y durante mucho tiempo estuve con esa tranca. Fue tan chocante lo que me pasó, que ni siquiera recuerdo el nombre del gallo. El otro día le pregunté a Eduardo Fuentes si se acordaba y se acordaba del tipo, pero tampoco del nombre", finalizó.
