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La exchica Mekano decidió realizar una osada serie de instantáneas, a pocas semanas de su quiebre con Francisco Kaminski.
El tercer episodio del podcast de moda de Eugenia Lemos tuvo como invitada a la cocinera y presentadora de televisión Virginia Demaría, quien conversó de todo en Dale Color! incluso comentó que la cocina es tan importante para ella, que a la hora de elegir ropa no se la prueba, pero sí, "todos los colores los relaciono con la comida, ‘¿qué rojo? ¿rojo jaiba? ¿rojo frutilla?’ Es que así es más fácil".
Virginia contó también que es muy decidida, la clienta ideal de las tiendas, porque "soy muy segura", entonces entra a un lugar, mira y sabe de inmediato lo que quiere. "Yo me visto para mí, al que le gusta que le guste y si no, me da exactamente lo mismo, porque quiero disfrutar, quiero pasarlo bien".
Conversando acerca de la importancia que tiene para ella su ropa y accesorios, Demaría sorprendió al contar que "le puse puerta blindada a mi clóset. Hace mucho tiempo entraron a robar a mi casa, por suerte yo no estaba, se llevaron varias cosas y dije ‘¡Ay concha, me cago si no está la chaqueta de cuero!", agregando que "empecé a pensar en esas cosas que son recuerdos de una, el zapato heredado y estaban. Obvio que lo más importante es que no nos pasó nada, no quiero que me mal interpreten, y desde ahí dije, no lo quiero pasar mal. Entonces, ahora tengo mi puerta blindada, y cada vez que salgo está la puerta blindada".
Respecto de si le sirve comentó: "ahora claro, toda mi familia se ha aprovechado de este beneficio y ahora están todos los documentos, todos los computadores, ahora soy una bodega y me voy mucho las tranquila".
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Pero eso no fue todo, porque además mientras mostraba sus zapatillas regalonas, que le regaló su esposo hace 20 años y que además, en esa poca las usaba Sergio Lagos, confesó que "me costó que mi marido me pescara, yo lo perseguí mucho a él, yo lo invité a salir hasta que lo logré y llevábamos unos meses pololeando y yo ya me quería casar, habría formado familia de inmediato, porque soy muy decidida".
"Estábamos pololeando y llevábamos un año, yo estaba lista (para casarse) y se le ocurre decirme (...) te tengo un regalo súper especial, ojalá te queden bien, no sé si es tu talla. ¡Cómo se le ocurre decirle a una mujer que lleva desde la semana de pololeo diciéndole que quiere casarse, cómo se te ocurre decirle te tengo un regalo especial!", comentó entre risas.
Finalmente, Demaría comentó que en lugar del esperado anillo, le llegaron las zapatillas de Sergio Lagos. "Llego a la casa y estaba la hoja de la impresora, porque tampoco habían llegado y me dice, pucha no alcanzaron a llegar, pero te las compré y yo me puse a llorar a mares, yo quería el anillo. Por eso, creo que estas zapatillas no van a salir nunca de mi clóset, me encanta guardar cosas que tienen historia".
